No hay nada más subjetivo que el arte. Apela a emociones, trata de tocar las cuerdas del alma del receptor, afinadas de forma diferente en cada persona. Existe una forma de objetivar lo subjetivo, que es mediante la creación de una predisposición en el receptor. La influencia de las ideas preconcebidas en la buena acogida de una obra es innegable.
Si quieres ser artista, basta con crear, y mucho
¿Qué vale más, ser artista por dedicación personal o serlo por aclamación popular? Lo que está claro es que no se puede ser artista de ningún tipo sin tener un catálogo de obras originales, y si alguien tiene un amplio catálogo, es difícil negar que se trate de un artista creador, independientemente de si su trabajo es del gusto general o no.